Es un tratamiento muy natural, reabsorbible con efectos duraderos, dirigido especialmente para las líneas finas y arrugas de expresión y si además el caso a tratar es por pérdida de grasa facial con la consecuente flacidez que ello provoca, su eficacia es aún mayor. Sus efectos se prolongan de 8 a 12 meses.
Se inyecta de forma indolora, con microcánula para evitar hematomas y no haya tiempo de baja, creando microdepósitos que van a sustentar la estructura del contorno de ojos nivelando la discontinuidad que crea el hundimiento de los pómulos y las bolsas y con ello, la piel rejuvenece.
El objetivo del tratamiento es nivelar estos dos planos, las infiltraciones producidas harán desaparecer de una forma inmediata la mirada cansada, mejoran las arrugas por flaccidez bajo el párpado inferior y reduce la sensación de bolsas. También se consigue un efecto de atenuación de la coloración de la ojera eliminando depósitos de melanina causantes de los mismos.
Al actuar en la región lateral externa, se atenúan también las arrugas de las “patas de gallo” y si se combina con toxina botulínica aplicada a las 2 semanas del ácido hialurónico (sólo en caso necesario), el efecto será completo